El Club de los Cuentistas estrenó 2013 con una contada en torno al
signo Capricornio, en la que el público abarrotó la sala y la calidad, como
siempre, no podía faltar.
Anabel R. nos presentó un libro recién llegado de la
librería La Gusana, “Las tres reinas de Oriente”, para que no se olvide que los
niños merecen cuentos y juguetes, no mirra y cosas así.
Pepe nos habló de Cleopatra y sus lujos caros, pues en el colmo de
la opulencia bebía vinagre con perlas disueltas sin poner cara de asco...
Marcos leyó un poema de “Adelfos”, de Manuel Machado, sobre un
hombre al que ni el vicio seduce, ni adora la virtud, pero que quizás es más
libre.
Iñigo relató la historia, absolutamente real, de una mujer pobre y
maltratada por la vida que logra vender cajas –vacías- con la magia suficiente
para que los niños duerman mejor.
Elena recuperó de la mitología a la ninfa Amaltea, que alimentó a
Zeus con miel silvestre y leche de cabra, uno de cuyos cuernos es el de la
abundancia.
Laureano recitó una versión de Blancanieves en la que ella hace
autostop y los enanos se forran en las carreras. Con su muy trabajada memoria,
participará en “Poemas a la Carta” en el K2 (c/Somera) el día 16.
Miren narró las peripecias de la hija de un molinero convertida en
reina, que finalmente logra librarse de un enano chantajista empeñado en
arrebatarle a su hijo.
Miguel nos contó la historia de Noé y su arca “tal como fue”: con
un unicornio a bordo difícil de amamantar y un trabajo fenomenal para alguien
que no sabía ni de barcos ni de carpintería.
Y de postre, Anabel M. nos hizo participar en un cumpleaños
perfecto, que adquirió una nueva dimensión cuando a una niña encantadora le
pagan por su trabajo y no con baratijas.
Con ese buen sabor de boca nos despedimos hasta el 8 de febrero,
todavía en invierno, en el que volveremos a reunirnos al calor que sólo tienen
las historias bien contadas, ese viernes con la excusa del signo ACUARIO.
La reseña de hoy la ha escrito Aurelio
Las fotos, el montaje fotográfico y el video son obra de Txema G.